El comienzo de una aventura [RL]

Aire en la cara. Humedad. Bosque. La convinación perfecta.
Me encontraba en algún punto de Awa, en Derbhad más o menos. Cabalgaba a toda velocidad sobre Peter con el viento dándome en la cara, los árboles pasaban a rápidamente, y alguna que otra hoja me daba en al cara pero no importaba. Sentía las fuertes patas de Peter chocar contra la mullida hierba, todo silencioso... todo...
¡Maldición, nos hemos perdido!
Jopetas... esto es un poco embarazoso...
En cuanto escuché esas palabras hice que Peter parara y me acerqué con él a las misteriosas voces.
Una chica al parecer perdida hablaba con su osito de peluche...¿de peluche? Vale... sí, esa parte fue muuuy rara.
- ¿ Estáis perdidos?-dije segura de que no me harían daño.
¿El oso era un objeto animado?

Llevaba varios dias de viaje ya, después de que Aira me trajera la noticia de mis padres, se había vuelto a marchar pero ahora que había sido tocada por un unicornio era yo quien iba desde la mansion de Celestia en la que me había dejado hasta la Torre de Kazlunn donde comenzaría mi aprendizaje.
Habí tomado todas lasprecauciones que me había recomendado, viajaba sola para no llamar mucho la atención, a un buen ritmo, sin parame en lugares con demasiado gente, por mitad del bosque siempre que me fuera posible y la mayor parte del tiempo llevaba una capucha puesta, se supone que nadie me conocia en Idhún pero eso no quitaba que tenía la genética de mi familia y eso tal y como estaban las cosas no era algo bueno. No lo tenía muy claropero se suponí que estaba lejos de los reinos humanos, lejos de Shia, pero aun así insitian en que tuviera cuidado, y no iba a llevarles la contraria.
En esos momentos me había metido por lo que si no miraba mal el mapa, era el bosque de Awa, lo mio no era la orientación pero algo estaba logrando, tenía que haber venido con alguien...
Iba al mejor ritmo que podía sin estrellarme contra un arbol, en los meses que llevaba en idhún, montar a caballo era una de las primeras cosas que había aprendido.
Oí unas voces, varías chicas o eso me parecia y otra cosa que no me quedaba muy claro si era chico o chica, procuré seguir sin llamar mucho la atención pero no se como llegué precisamente hacia donde estaban y vi a dos chicas y... ¿eso era un oso de peluche? es mas ¿ eso era un oso de peluche que hablaba y se movia?
- yo creo que si - respondí a la pregunta de una de las chicas - no conozco mucho este sitio - mas bien no conocia mucho nada de Idhún, pero quizas pudieran señalarme el camino mas corto hasta la torre de kazlunn , miré un rato al osito aun bastante sorprendida

De la nada apareció una humana encapuchada y el osito nos saludó.
Hola Guardián-dije con una gran sonrisa-Mi nombre es Martah, feérica-yan, con algunos estudios de magia-dije mientras hacía aparecer una bola de agua en mi mano, la hice desaparecer y seguí-Bien... puesto que las dos estáis perdidas os llevaré a donde queráisMe falta algo... Ah, se me olvidaba, este es Peter, no le tengáis miedo, es inofensivo mientras que no me ataquéis o hasta que yo le de la orden, ¿dónde vamos?-dije montando sobre Peter con una gran sonrisa.
Caí en que la chica del oso, Chiaki no llevaba montura y también en que su nombre era algo extraño-¿Puedo llamarte de otra forma? Como Chi o algo así, es que, tienes un nombre poco común y creo que se olvidará....-dije algo tímida.
Me caerqué lentamente a lomos de Peter hacía la chica misteriosa, no hablaba mucho y la verdad, por muy idhunita que sea... ¿Quién lleva capucha en Awa? ¿Y el mapa? Mmms... eso es algo raro... perdidas, las dos. Solo yo conozco el camino, he venido aquí para divertirme y me encuentro con dos chicas algo extrañas y solas...¡¿Y ningún chico?! Aaaains...

Al parecer la primera chica la del osito, se había perdido también y eso a a pesar de que ella mismo había dicho que vivía en ese bosque. Miré a la otra chica ella si parecía saber donde estaba y por donde se salía, quizás pudiera ayudarnos, pero ella no parecía del todo humana, todavía se me hacia raro a pesar de los meses en Celestia, ver a los mestizos o incluso a los seres de otras razas, era todo tan... de cuento, que era difícil de asumir a pesar de que ya supiera todo eso desde pequeña.

La chica humana se presentó como Chiaki, y presentó al osito como un espíritu llamado Guardian, pero lo mas sorprendente de todo fue cuando Guardian no saludó, la otra chica era Martah, y al parecer era una mestiza entre Yan y un ser Feerico, ella si sabía bien donde estábamos y se ofreció para ayudarnos a llegar a donde fuera. Después de que ellas dos dieran su nombre me tocaba a mi, no veía mucho peligro en ellas como todo lo que me habían dado en la mansión antes de salir

- Yo...- fui a deir quien era pero entonces los oí detras mia, eran los mismo que me habían perseguido uando decidí internarme en Awa para despistarlos - yo tengo que irme, ojala nos volvamos a ver - eché un vistazo atrás y arrié al caballo para que empezase a correr en direccion contraria, aun sin saber donde llegaria, no tarde en mucho en desaparecer de alli*