Neku Sakuraba, el Juglar

Invitado Sáb Nov 03, 2012 4:34 pm

"Para mi yo del futuro:

¿Te acuerdas cuando conociste a Érica? Era hermosa y bella, tenía los ojos verdes y claros, su cabello moreno caía lujosamente por sus hombros... su sonrisa era hermosa y agradable, que podía hacerte sacar una sonrisa.
Aunque, ¿te acuerdas de que un día todo cambio? Su sonrisa pasó a ser un rostro serio y sin vida, su cabello moreno y lacio pasó a ser blanquecido y desaliñado, su piel se volvió blanca como la nieve. Sí, te estoy hablando de ese fatídico día en el que a las seis y cuarto de la tarde fue apaleada y asesinada por unos bandidos de la villa. Ese día en el que nosotros nos quedamos embobados y ella nos miraba con lágrimas en los ojos gritando en busca de nuestra ayuda con las últimas fuerzas que le quedaban, en su último segundo de vida, ¿no recuerdas como nos decía: "¿Por qué no me ayudas...?" antes de morir? ¿No te arrepientes después de que pasaran en tu época ya seis años? En mi época han pasado solo dos meses y no me lo quito de la cabeza, ¿estaría mal que me muriera yo también... voluntariamente? Sí, sí, suicidarse. Eso te afectaría a ti, pero... ¿no está peor que los remordimientos acaparen tu corazón? Yo no quiero eso, así que te mando esta carta para saber... ¿quieres que tu corazón no tenga ni una gota de luz? ¿o prefieres pasar una vida inmortal con ella?
Espero tu respuesta.

De tu yo del pasado,
Neku Sakuraba.

Invitado Dom Feb 03, 2013 4:51 pm

Porque no está bien olvidarse de las cosas...

Fue ese día cuando la abracé tanto, cuando ella no pudo darse cuenta...
Fue ese día cuando se escapó su gato negro... de pelo rizado...
Fue ese día que apareció un camión blanco...

Y no te diste cuenta...
Porque no está iben olvidarse de las cosas...

Fue ese día que te agarré la mano para que no te fueras... hacia la carretera...
Fue ese día que al pisar la acera... se quedaron con la boca abierta...
Fue ese día que se cayó una barra de metal... y era tan grande...
Fue ese día que andaste y me salvaste... de esa barra grande...

Y no te diste cuenta...
Porque no está bien olvidarse de las cosas...

Fue ese día que te agarré la mano... y te rodeé la cintura...
Fue ese día que fui corriendo hacia las escaleras... agarrando tu mano...
Fue ese día que fumos al mirador... apareció otro chico...
Fue ese día que sin querer la solté...
Fue ese día que las escaleras estaban detrás tuya...

Y no te diste cuenta...
Porque no está bien olvidarse de las cosas...

Fue ese día en el que me harté... de la bruma y de ese chico...
Fue ese día que me harté...

De verte morir

{...}

Fue ese día que volví a verte... con el gato negro...
Fue ese día que te agarré... de la mano...
Fue ese día que te empujé... hacia la acera...

Y no te diste cuenta...
Porque no está bien olvidarse de las cosas...

Entonces te vi, por última vez y tus ojos brillaban como el amanecer, te quise tanto, no pude darte un último abrazo...
Fue ahí tan triste...
El chico se quedó mirando, sonriente, con lágrimas en las mejillas...
Y me miraste con tal delicadeza...

Y no te diste cuenta... porque no está bien olvidarse de las cosas...

Neku Sakuraba, el Juglar

Neku Sakuraba, el Juglar

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