La feerica y el Shek (RP)

Yo era la nueva reina de los dragones, porque así lo quizó Kvothe un buen amigo mío confiable y muy portector.
Yo acepté ya que había sido creada por dragones a loss 10 años de edad cuando me separé de mi familia por asuntos personales. Me había aconstumbrado a todos los costumbres de los dragones que llegué a criar 3 dragones que ahora eran mios y yo era su madre.

Salí de mi residencia para ir a pasear un poco por mi nuevo reino y explorar lo que aún era desconocido para mí.
Mientra caminaba con mis dragones bebes a mi lado, había encontrado cosas maravillosas, desde paisajes, otros seres vivos cuando de repente choqué con alguien y me caí al suelo con un poco de violencia porque el impacto había sido un poco grande.
Mis dragones se acercarón a mi y gruñerón a aquél sujeto. Lo miré y me levanté con su ayúda y sacudí mi vestido azul con renda dorada.

-Si estoy bien...y ústed ? - pregunté mirándolo y manteniendo un poco la distancia mirándo un poco mis dragones que subían por mi cuerpo y dos quedabán en mi hombro y el otro encima de mi cabeza. Los intenté tranquilizar acariciandolos y me quedé mirándo el sujeto.

-Que haceís por mis tierras ? Y quien es ústed si es que era dama puede saber...-dije preguntándo con humildad y simpatía -

El chico me había dicho que solo estaba de pasajé por aquellas tierras. Lo miré con alguna desconfianza pero mismo así fingí que lo creía.
Acentí y me mantuve quieta sin movermé.

-Ya veo...pues disfrute entonces de su estadía o viajé...-dije sonríendo un poco y cuando escuché su pregunta alzé un poco mi cabeza de forma majestosa.

-Mi nombre es Daenerys Targaryen ...soy una elfa pero actualmente Reina de los dragones de estas tierras...- dije y lee sonreí un poco más. Yo no era muy buena con las plabras y mucha veces cuando hablaba lastimaba a las personas que ciertas palabras o entonces simplesmente no sabía como explicarmé. Yo no era muy sociablé y odiaba mucho las personas mentirosas o que simplesmente ocultabán algo.

-Encantada de conocerlo Sir Sasha...bueno seguiré con mi paseo matinal...que tenga un buen día - dije y seguí caminando hasta llegar a un lago donde me desnudé y entré al lago con mis 3 dragones. Drisfruté de la água fresca y cristalina de aquél lugar que tanto amaba. Era mi refúgio para cuando necesitasé estar un poco sola y pensar.

Mientra entraba al lago escuché a mis dragones gruñieren y giré solamente mi rostro y pude ver nuevamente a Sasha. Los escuché pedir perdón y sonreí ampliamente volviendo a mirar el lago y caminar sumerjiendo mi cuerpo.
Mis hijos dragones seguían gruñiendo y yo para los tranquilizar hablé con ellos en una lengua diferente.

-Acros anima creater moris - dije con una suave voz y los dragones se calmarón alejándosé de Sasha con un rostro molestador. Me giré y miré de frente a Sasha.

-No tiene importancia Sasha...y perdona mis bebes dragones, son muy desconfiados y protectores...- dije con una ligera sonrisa y me quedé en el mismo sitio. Él solo conseguía ver mis hombros, mi rostro y mi pelo nada más.

-Que te ha hecho venir hasta donde yo estaba Sasha ? - pregunté con curiosidad -

Escuché cada palabra de Sasha con atención mientras miraba de lado a mis dragones que se encontraban a unos metros de distancia de él con un aire muy desconfiados y solo les sonreí.
Miré nuevamente a Sasha y contesté a lo que él quería saber.

- Sasha no creo que estes aquí solo por curiosidad a mi persona pero como algo más - dije y me acerqué al borde del lago acostandomé con mi cuerpo sumerjo en el água.

- Se que no se ve mucha gente por aquí pero eso es porque los dragones en este momento están fuera o están en su residencia...además debes estarté preguntando como esque una elfa puede ser Reina de los Dragones...es simples yo fuí creada con ellos cuando tenía 10 años y me alejé de mi familia, me aconstumbré a sus vidas y más tarde me nombrarón reina.
Dije con una ligera sonrisa en mi rostro angelical mientras lo miraba con curiosidad. Además era guapo y todo eso.

-Ahora que sabes eso...estás satisfecho ? Algo más que quieras preguntar, decir o....hacer ? -dije mirándolo a los ojos mientras mis dragones se acercan con una toalla. Me levanté y me enrollé en esa toalla y me senté a su lado-

Lo escuché y sonreí de lado mojando mis pies en el lago. Su propuesta era tentadora por eso acentí sonriendolé.

-Si claro que te puedo mostrar mi reino pero tengo una ultima pregunta, puedo confiar en tí cuerto Sasha ? - le pregunté pero mis dragones empezarón a mirarmé y yo miré a Sasha nuevamente.

-Muy bien vamos entonces - se levanta y pone nuevamente el vestido azul ccon riendas doradas y deja que sus dragones suban a su cuerpo y lo espera levantada y me extiende la mano.

-Seguramente te gustará la visita pero tenemos que tener cuidado, hay muchos peligros y tú siendo un desconocido no creo que muchos dragones te miren comoun amigo - dije sonriendole mientras lo ayúdaba a levantarsé del suelo -

-Si claro que me puedes llamar de Dae...-dije mirándolo a los ojos para después apartar la mirada.

Seguí caminando con Sasha a mi lado y escuché la pregunta que me hacía y me detení para ver los dragones adultos en aquél lugar y le sonreí.

-Bueno es un lugar tranquilo, pero hay muchos peligros Sasha, no te fijes solo en lo bonito que es este lugar por veces puedes cruzarté con algo que tú proprio desconoces y ahí empieza un juego entre la vida y la muerte - dije sonriendo de lado susurrando para no asustar a los dragones y me acerqué a ellos.

Cuando uno de los dragones me vió empezó a gruñir. Eran dificil de acercarsé pero todos ellos me conocian por eso me dejarón acercarmé pero con Sasha fue diferente empezarón a querer atacarlo. Los detení alzando la voz.

-Patrio Dolorisistron...-dije hablando otra lengua y estos recuarón. Lo miré seriamente y miré a Sasha.

-Ven ahora te dejarán acercarté...- dije extendiendo su mano -

Off: Cambio a rol en primera persona, es mas facil.

Miré desconfiado a los dragones, pero siempre manteniendome en calma, no quería montar una sangría. Además sabía que yo podría con esos dragones, pues fui duramente entrenado y era como una maquina de matar, veloz y agil... Y sobre todo mortifero.
Miré a Dae de reojo y me acerqué al dragón, cuando estuve cerca dudé un momento en acariciarlo o no, pero finalmente lo hice. Entonces mi parte shek quiso salir y de hecho estuve a punto si no hubiera sido porque me había alejado ya del dragón. Todo esto permaneciendo lo más normal posible.

-Bien... ha estado bien.

Dije sonriendo y fingiendo que estaba incomodo allí con el dragón. Quería salir ya de la cueva, salir.

Off: Siento la tardanza.