Ficha de Torabel

NOMBRE : Torabel Avlis Zerep (Tory para los amigos ^^)

RAZA: Mestizo- Feerico\Celeste

EDAD: 17 Años

SEXO: Hombre

DESCRIPCIÓN FÍSICA: Torabel es un chico alto y esbelto, con la piel blanca. Su pelo es de color ceniza, siempre lo lleva rvuelto y de punta en la parte de detrás. Sus ojos son blancos, ligeramente rosados, su madre decía que tenía los ojos del mismo color que las flores de primavera.

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Spoiler:

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA: Torabel es un chico alegre y simpático, siempre tiene una sonrisa en la boca, y siempre sabe como hacer sonreír a los demás, es optimista a más no poder, siempre sabe ver el lado positivo de las cosas. Y cuando el ha perdido la esperanza es por dos cosas. O por que todo esta perdido, o por que le ha dado un bajón repentino.
Pero su optimismo y su alegría inquebrantable no son más que una máscara para ocultar lo que realmente le pasa por dentro. Y es que Cada vez que se hace de noche Torabel cambia por completo, se vuelve una persona nerviosa e impulsiva, y es que Torabel tiene un miedo infinito a la oscuridad y a la noche, cada vez que se duerme, tiene una horrible pesadilla recurrente, en la cual, es perseguido y engullido por la oscuridad y el mal más absolutos.

HABILIDADES: Tiene la magia feerica de su parte ya que su ascendencia feerica es mayor que su ascendencia celeste, de la cual sólo conserva la capacidad de levitar y un poco de la capacidad de los sentimientos de los celestes.
Es bueno con el manejo de el arco y los cuchillos.
Sabe nadar muy bien.
Sabe muchas cosas sobre plantas curativas ya que se crió en Alis-lithban.
Siempre sabe hacer como sonreír a los demás.
Pocas veces se pelea con alguien.

DEFECTOS:Tiene un temor horrible e insuperable a la oscuridad.
Por la noche se vuelve arisco y nervioso.
No soporta que le dejen sólo de noche.
Se deprime con las despedidas.
Es un horrible cocinero.
Le teme al fuego.

AFICIONES: Nadar, comer, leer, practicar con el arco, dar largos paseos por el bosque, hacer sonreír a los demás, pasarlo bien, estar en contacto con la naturaleza.

COSAS QUE ODIAS: Los malvados, los injustos, los que destrozan la naturaleza, la infusiones de te azul (originario de Celestia XD) los que le toman el pelo, la humedad (hace que se le encrespe el pelo) y el frío.

PASADO: Hace mucho mucho tiempo (Bueno, no hace tanto ahora que lo pienso) un joven mago etéreo que estudiaba en la torre de Drackwen estaba dando un paseo cuando de repente observo un ligero movimiento procedente de un arbusto cercano, el mago se acercó y se encontró con la sorpresa de que un hada se encontraba heroica en el suelo, una enorme rama la había aplastado, la rama había caído de un árbol muerto y el hada no tuvo tiempo de reaccionar. El mago la curo lo mejor que pudo, y en el momento en el que la bella hada y el joven mago cruzaron sus miradas, surgió en ellos el sentimiento que les uniría por siempre, el amor. Unos años más tarde, el hada y el mago contrajeron matrimonio y tuvieron un precioso hijo al que llamaron Torabel, que en idhuniaco significa hijo de las lunas. Todo marchaba de maravilla, hasta que tres días después de nacer Torabel un malvado nigromante llego a la casa de las feliz pareja. El padre intentó defender a su familia, pero los conocimientos del nigromante eran superiores a los del mago y terminaron con su vida. El nigromante entro sin previo abiso a la habitación de Torabel, dio un fuerte golpe a la madre y la tiro al suelo. Después de observar un tiempo al niño se volvió hacia la madre y la dijo que cuando El Niño cumpliera cinco años volvería para llevárselo consigo. Los años pasaron, y la madre cada vez más asustada contaba el tiempo que faltaba para que el nigromante volviera. En todo ese tiempo, madre e hijo fueron acogidos en la torre de Drackwen, gracias aquel el maestro del padre de Torabel se apiadó de ellos. Durante los cinco años que pasaron, Torabel creció sano y feliz, su pelo era verde como la hierva, su piel azulada como el cielo, y sus ojos rosas como las flores de primavera. Todo parecía ir bien. Hasta qué el día en que Torabel cumplió cinco años . . . No laso nada. El nigromante no se presentó y todos, convencidos de que aquel malvado ser se había olvidado del niño, bajaron la guardia. Pero tres noches después, la puesta del la torre exploto con un estallido de oscuridad, y el nigromante hizo acto de presencia. Se cobró la vida de muchos mago que le salieron al paso para defender a la madre y al pequeño Torabel. El nigromante abanzaba lenta, pero imparablemente por los pasillos de la torre. Mientras el maestro del padre de Torabel y la madre del pequeño bajaron a los sótanos de la torre. En lo más profundo de los sótanos de las cuatro Torres de hechicería había una habitación llamada la sala de las sombras, donde los archivados guardaban al amparo de las sombras todos los objetos de valor. El cometido de las sombras era mantenerlos alejados del paso del tiempo y por eso ahuese conservaban objetos perteneciente a las primeras Heras de Idhun. El plan era meter allí al niño hasta que detuvieran al nigromante. Y así se hizo, madre y maestro metieron al inocente Torabel en las sala de las sombras. Lo único con lo que no contaron fue que tardarían trece años en derrotar al nigromante fue una lucha horrible en la que murieron miles de personas, pero cuando creían que todo había acabado y podían sacar al pequeño Torabel de la cámara de las sombras, se llevaron una gran sorpresa. Torabel no había muerto, seguía vivo, y había crecido, ahora tenía los diecisiete años que debería tener. Pero las sombras habían hecho estragos en el. Su pelo, antes verde y lustroso como los brotes nuevos de los árboles ahora era de un gris ceniza oscuro. Su piel que antes había sido azulada como el cielo ahora era blanca como la porcelana. Y sus ojos que habían sido rosados somo las flores de primavera ahorran eran blancos, todavía conservaban alguna que otra veta rosada. Pero lo peor fue que Torabel quedo traumatizado y con un miedo horrible a la oscuridad, a las sombras que lo llamaban desde las noches más oscuras. El archimago maestro de su padre acogió a Torabel durante algunos meses, en los que Torabel pareció recuperarse de su horrible experiencia con las sombras.
El archimago le contó que su madre había regresado a Awa, así que desde ese momento Torabel busca desesperadamente a su madre por todo Idhun.