Sombras de la magia [Entrenamiento-Fuerza mágica]

Off: el post se ira editando para ir aumentando el post, principalmente se va a mejorar la fuerza mágica, aunque se podrá ver algunas veces algún aspecto de capacidad mágica, destreza etc etc, pero también intentare entrenar Capacidad mágica y algunas cosa mas.

On:

Después de unos días de viaje llegue a unos llanos cercanos a un pueblo, la figura sombría miro a su alrededor y con una sonrisa en su rostro pues escucho unos pasos, baje la mirada y vi unos cuantos soldados de Kvothe, ese gobernador de pacotilla, susurre unas palabras y sus manos brillaron con un leve tono azulado que empezó a brillar mas y mas, una esfera apareció en las dos manos que estaba cerca, alimentándose de la magia y de los sentimientos malignos del Nigromante, la esfera era de un color azul oscuro y iluminaba muy fuertemente, mas los soldados vieron una esfera azulada ante una figura sombría, la esfera azulada empezó a chisporrotear unos rayos azulados ante tanta carga de energía mágica, empezó a agotar la magia del Nigromante totalmente, llegando al limite, pero sin mas lo lanzo hacia los soldados de Kvothe, que serian unos diez de patrulla, la esfera fue rápidamente y choco ante lo que parecía el capitán, mas una explosión hubo, en el lugar donde debía haber vida y soldados solo quedaba una mancha negra, no quedaba ningún superviviente, pero sin duda esto llamaría la atención y así fue por que un campesino se fue corriendo a avisar a la guardia o quien fuese, a las pocas horas y con la energía renovada empezaron a aparecer unos magos a su alrededor, unos quince, sin mas las espadas aparecieron en su mano, y los magos lanzaron una andana de bolas de fuego, al ver tantos conjuros susurre unas palabras, runas en idhunico arcano aparecieron flotando a mi alrededor, el aire parecía desviarse ante el contacto de las runas y empezar a girar al son de dichas runas, nunca antes había intentado corromper tantos hechizos, la vida empezó a ser drenada para la corrupción de tantas bolas de fuego mientras daba tanta energía mágica para dar tal fuerza a este hechizo para que matase a todos o dejase apenas supervivientes, y las bolas de fuego estuvieron a punto de chocar contra el pero la corrupción para esos hechizos fue liberada, haciendo que las bolas de fuego se tornasen oscuras y sombrías y volviesen rápidamente a sus lanzadores, intentaron huir pero no pudieron y solo quedaron sus huesos ennegrecidos, y tal vez fuese cosa del destino que le quería muerto pues cuando mate a esos magos aparecieron dos soldados que escucharon el ruido de la batalla, mas no me quedaba magia suficiente para enfrentarme a los guerreros y ellos sin duda interiormente lo supieron pues se abalanzaron sobre mi, me puse en una posición defensiva, listo para saltar hacia atrás y cortar a uno, uno iba mas adelantado que su compañero y ese fue su error, con una espada moví su espada mientras con la otra atravesaba la apertura del yelmo, un yelmo mediocre pues la espada salio por el otro lado manchada de sesos y otros tipos de jugos, sin mas lo saco y espero a que viniese el otro soldado, vacilo un momento y me acerque rápidamente a el, mientras una sonrisa siniestra apareció en mi rostro, eso hizo temblar al soldado mientras alzaba el escudo para defenderse de la espada que se alzo para dar un golpe alto, pero aproveche con la segunda espada para atravesarle el abdomen, al hacerlo se escucho un crujido y mire al soldado, mas no era un soldado si no un joven, sin duda un mercenario, la espada le había roto la columna vertebral y estaba vivo, viviría como un debilucho y una carga para los demás y eso no se podía permitir y sin mas alce una espada y le atravesé el corazón dándole una muerte rápida y indolora, algo fuera de lo común en el, me gire y busque por el bosque cercano que había en la llanura y vi a un feerico, que le apuntaba con un arco, espere pacientemente a que disparara y así lo hizo, el disparo surco el aire y el se movió corriendo hacia la izquierda y en dirección al bosque donde podría haber mas arqueros, se iba parando a descansar detrás de alguna roca o árbol o cualquier sitio para que no lo dispararan, al final llegue al bosque y me acerque a un claro, mientras me ocultaba en los arbustos, en el claro había quince feericos, con el símbolo de los rebeldes, no parecía a ver mas, pero me pare en seco y mire hacia los arboles, había tres centinelas en tres arboles que apuntaban hacia el claro, listos para disparar por si alguien atacaba, con una sonrisa en el rostro pensé: Pues no son tontos estos feericos, pero eso no les salvara. susurre unas palabras y cree tres esferas oscuras pequeñas pero muy potentes que empezaron a crecer un poco mas, pero muy poco pues las quería pequeñas, de mientras empece a rellenarlas de energía mágica a tope, me enfrentaría a los tres supervivientes con las armas, note que me quedaba poca energía mágica y que si no lo lanzaba ya desaparecerían, aguante unos segundos mas para acto seguido lanzarlas, esas trece bolitas oscuras surcaron el aire, mataron a los centinelas atravesando su corazón y a los otros diez feericos cada uno en una parte vital, uno de ellos le atravesó los pulmones y duro unos minutos antes de morir, los otros tres estaban en un estado de asombro y no se movían, salí de los arbustos corriendo y ellos parecieron volver a la normalidad, dos de ellos se abalanzaron sobre mi mientras sosteniendo sus garrotes garrotes y el otro susurro varias palabras arcanas, mientras pensaba: mierda estoy jodido, es un puto mago... y algo que nunca solía hacer pero que intente, salte y di una voltereta en el aire, un feerico alzo su garrote y me dio en el estomago, pero no podía parar, si el conjuro me daba me fastidiaría mas, y así que seguí corriendo con dificultades para respirar, aunque después de unos segundos se me paso, y antes de que el feerico terminase el conjuro se vio ensartado por una espada mientras me miraba y decía en un murmuro que escuche: ¿por....que? saque la espada de un giro brusco y me gire repentinamente y mientras giraba la espada corto la mejilla de un feerico que se acerco demasiado, en mi rostro apareció una sonrisa, di una patada al estomago del feerico que estaba bastante cerca eso le hizo inclinar la espalda en un acto reflejo, acto seguido le patee la cara lanzandolo por los suelos y con una espada tiraba el garrote a unos metros del feerico que se acerco para ayudar a su compañero y con el segundo le corto el cuello asfixiandole con su sangre, el otro dejo el garrote en el suelo y se alejo corriendo, pero había recuperado suficiente energía mágica durante el combate y de un susurro en idhunico arcano hice aparecer en la punta del dedo una llama azulada que luego apareció en el tobillo del feerico y se extendió por todo su cuerpo, chamuscando su carne, sus huesos, sus músculos, un grito desgarrados azoto el bosque.


Han pasado varias horas del entrenamiento, ¿y donde estaba ahora? muy sencillo en otro lado, algo alejado del pueblo había un campamento de mercenarios, unos veinte, y algo mas lejos según había visto, había otro campamento, pero de bandidos y solo había ocho, y sin duda estarían vigilando el campamento, así que me dirigí hacia allí corriendo, mas tarde unos quince minutos en llegar, y mire hacia el campamento, escale un árbol y me coloque en una rama para conjurar, con estos acabaría rápidamente y con magia, susurre unas palabras y unas runas en idhunico arcano flotaron a su alrededor, mientras el viento giraba alrededor de dichas runas, las hojas de los arboles marchitas a la vez también giraron, mientras iba preparando energía mágica para un conjuro que acababa de idear, me iba quedando sin energía mágica y al final solté el conjuro, el suelo de los bandidos empezó a ennegrecer y no se fijaron, mientras pensé: Esto va a resultar divertido. y así fue pues repentinamente del suelo emergieron unos "tentáculos" negros que agarraron por la pierna, brazo, abdomen o cualquier parte a los ocho bandidos, al cogerlos los "tentáculos" empezaron a tener un brillo rojo mientras los bandidos iban envejeciendo, al final cayeron inertes y los "tentáculos" desaparecieron, el conjuro les había absorbido la energía vital, su vida... salte al suelo y salí corriendo hacia el campamento mercenario, y antes de llegar habría recuperado suficiente energía mágica....para volver a divertirse.


Llegue al campamento de los mercenarios, esta vez fue media hora pues pare a descansar, estaba agotado, crear un nuevo conjuro era agotador y ese conjuro no iba a ser una excepción, al llegar me camufle detrás de una roca con un extraño corte que dejaba ver el campamento, empece a susurrar unas palabras y unas llamas azuladas cubrieron su brazo, y al susurrar otra palabra al finalizar de dar casi toda su energía mágica empezó a ir rápidamente hacia la hoguera, y al chocar contra el fuego de la hoguera empezó a brillar un fuego verde esmeralda donde surgió un dragón de llamas y todo lo que tocaba estallo en llamas, solo sobrevivieron cinco soldados y entre gritos empezaron a buscar al responsable, mas fue una suerte pues dos mercenarios se acercaban hacia la enorme roca, y empece a empujarla, por suerte el suelo no sujetaba la roca fuertemente y al empujarla durante unos minutos la roca se desencajo y empezó a rodar por el suelo, los dos mercenarios intentaron apartarse y solo uno lo medio consiguió, pero sus piernas fueron aplastadas y la espada estaba atrapada dentro de la roca, su compañero estaba....pues debajo de la roca, me acerque rápidamente al mercenario y le atravesé los pulmones, para que se asfixiara, los otros tres llegaron y lo rodearon con los escudos por delante...estaba rodeado, pero sufrieron un error de calculo, pues el de la derecha había dejado una apertura en su escudo y aprovechando dicha apertura con una espada moví su escudo y con la otra atravesé su abdomen para ir subiendo con la espada y sacarla repentinamente, pare con las dos espadas las armas de los otros dos y di una patada al escudo de otro, y eso me fastidio levemente el pie, que tonto era al golpear un escudo de hierro, pero no había pensado eso, y gruñendo susurre unas palabras con la energía mágica que había conseguido a los pocos segundos, sin mas a la espalda de los dos mercenarios apareció una especie de humano con una enorme hacha, que alzo el hacha y golpeo a la espalda del segundo para matarlo acto seguido, el ultimo superviviente se giro para defenderse rápidamente pero empece a golpear rápidamente con las dos espadas su espalda haciéndole brotar sangre para que antes de que se girase ser atravesado, una espada se quedo algo trabada en las costillas mientras la otra atravesaba el corazón y sin mas arranco la espada y me fui del lugar, el humano de sombras no había durado apenas unos segundos, pues había usado casi toda su energía mágica.

Fin Del entrenamiento.