Búsqyeda en Awinor(continuación)

Tras varios días de vuelo atravesando todo Idhun y apenas parando para comer beber y descansar, conseguimos llegar a tiempo a Vaniss...A tiempo de ver la ejecución de mi madre, que iba a realizarse en medio de la plaza de la ciudad...la orca ya estaba montada y lei en un cartel fijado en la puerta de la muralla de la ciudad que mi madre seria ejecutada al amanecer.
Aterrizamos en una arboleda cercana a la muralla para que la dragona pudiera adoptar su forma humana y asi no llamar la atención.
-Hemos llegado demasiado tarde Nithy...Todo esto no ha servido de nada...-La dige entre lagrimas.-Cuando amanezca la ejecutaran y ni siquiera he podido despedirme de ella.
Era toda desesperación y lagrimas mientras Nthy y yo caminabamos sin rumbo por las calles de Vaniss, atestadas de personas indiferentes a mi dolor que solo se preocupaba por sus quehaceres diarios...
Agradecí profundamente la presencia de la dragona, pues la compañia me resultaba sumamente reconfortante.
-¿Qué voy a hacer?-Supire entre más lagrimas.

No soportaba ver a Alae de aquella manera, a pesar del escaso tiempo que llevaba acompañándola.

- Encontraremos una solución... - No estaba completamente segura de que eso pudiera ser cierto, pero aún así mantenía la esperanza de poder ayudarla. - ¿Crees que podemos hablar con su captor?

No estaba muy segura de mi plan, pero aún así, era lo único que teníamos.
Si todo marchaba bien, le entregaríamos la escama y él soltaría a su madre. Si no... quizá debería recurrir a mi forma dragona...

- No te preocupes, todo va a acabar arreglándose y podrás volver con tu madre... - Sonreí intentando tranquilizarla. - Hasta entonces, estaré contigo.

recapacite y medite su segerenfia para finalmente negar con la cabeza:
-Me temo que su decision este tomada...-Entonces,y como anteriormente,Iral me ilumino y trace un plan-Quiza aun quede esperanza...se exactamente donde se encuentran los calabozos,y estos tienene una pequeña apertura a una callejuela tras el castillo...si pudieramos librarnos de los barrotes de algun modo...-Mi plan era solo un esbozo de lo que debia ser si keria salvar a mi madre...
Yo comentaba a la dragona mi plan sin sikiera pararme a pensar k solo la conocia de unos pocos dias y k no tenia ninguna obligacion de continuar con aquello:
-Nithy..esta no es ti guerra,si ahora deseas volver a tu tierra,lo entendere y aun asi segure teniendo una cuenta pendiente contigo...Sabes? Habia oido que los dragones eran criaturas superiores y orgullosas y que no acostumbran a interponerse en asuntos de razas inferiores pero veo k es mentira;Sois criaturas nobles y bellas-la sonrei,pues se habia combertido ya rn una gran amiga para mi..
____
FdR:Disculpa la ortogtafia y la escritura pero postear desde el movil se hace un poco duro..^^

Volví a pensar de nuevo, pero la nueva idea de Alae me atraía aún más. Teníamos más posibilidades de ganar de esta forma.

- Es una buena idea. - Miré hacia todos lados y sonreí. De pronto pensé en visitar mi antigua casa, para ver de nuevo la habitación de mi compañera y recordar, aunque lo descarté al recordar que mi futuro ya no se basaba en el pasado. - No importa que no tenga que ver conmigo, te dije que te ayudaría, y lo haré en la medida que me sea posible para que puedas ser feliz. No me gustaría ver de nuevo a una feérica llorar. - Sonreí de nuevo y alcé la vista al cielo. - ¿Me muestras el camino?

Mientras caminábamos cerré los ojos y dejé que el suave viento acariciase mi rostro.

- Los ideales, normalmente suelen estar sobre valorados. Creo que todas las criaturas tienen algo orgulloso y frío en su interior, y a la par, conviven con una esencia amable y noble. Quien sabe... Hasta los sheks podrían llegar un día a alcanzar esa calidez... - Entrelacé mis manos por la espalda y sonreí, recordando como el shek, amigo de Lunnaris se había hecho amigo de dragones, y como yo, en mi pasado, también tenía una pequeña luz que me guiaba hacia la bondad.

Escuché atentamente las palabras de la dragona blanca mientras caminabamos sin llamar la atencion hacia un callejon maloliente.
-Gracias por ayudarme Nithy...siempre tendre una deuda contigo.
A continuación silve imitando al canto de un pajarilli de la forma en la que mi padre me habia enseñado,esperando a k mi madre se asomara por alguno de los ventanucis con barrotes que se encontraban a ras del suelo.La espera solo duro unos segundos,y pronto el rostro palido de mi madre rodeado de enmarañados rizos aparecio por un ventanuco cercano:
-Alae,hija mia!-susurro mi madre-Gracias a Iral que estas viva,temia que un swait te hubiera deborado...-confeso entre lagrimas-Lastima que de nada haya servido,pues me ejecutaran al amanecer.
Observe como apenas quedaban restos de los soles y las primeras estrellas aparecian en el firmamento,se nos acababa el tiempo:
-Nada de eso,madre.He regresado a salvarte y no he venido sola pues una criatura mas noble y valiente que el mitico Yandrak ha venido conmigo a ayudarnos.Ella es Nithy,madre,-las presente-Nithy la dragona Blanca como la nieve.
Mi madre contemplo a la muchacha con admiracion y la dedico una inclinacio de cabeza.
-Madre-llame su atencion-cuando el gardia duerma,vendremos,arrancaremos los barrores y te liberaremos.
-Aah! Mi pequeña ingenua,yo misma forje estos barrotes, y te aseguro que no podras arrancar...aunque si pudierais fundirlo...Quiza tu amiga ,la dama blanca alada,Nithy,si pueda hacerlo lo bastante rapido...
Madre e hija nos volvimos a esperar la respuesta de la dragona.

No quise interrumpir aquel reencuentro madre-hija, por lo que me dispuse a esperar.
De pronto, ambas comenzaron a elogiarme y pude ver que Alae había heredado su manera de trazar los planes de aquella mujer.

- Simplemente no podía dejarla sufrir, y era algo que estaba a mi alcance realizar- sonreí mirando a Alae - Tiene que halagar a su hija, ella es la verdadera heroína aquí. Su corazón es enorme, y el amor que siente por usted, la hace ser aún más extraordinaria de lo que es.

Miré a ambos lados del callejón y comprobé que no había nadie. A pesar de ser estrecho, un dragón podía albergarlo sin problemas.

- Por favor, aparta un segundo, me transformaré y fundiré sin problemas el hierro. - Miré de nuevo a la semi feérica y me dispuse a transformarme. - Vigila todas las entradas, no podemos permitirnos el lujo de ser descubiertas en esta situación. - En el lugar de mi forma humana, apareció una dragona mediana, de escamas blancas relucientes. Entre gruñidos pude pronunciar unas últimas palabras antes de soltar una fina llamarada que fundiría los barrotes. - Por favor, échese hacia un lado.

Mis ojos se abrieron como platos al ver como Nithy tomaba se forma de dragona y se ponia a realizar su cometido...sin esperar a que el guardia se durmiera.Me aparte como la dragona habia dicho y rece a las tres diosas para que los guardias no hicieran ronda en aquel momento.
Si descubrian a mi madre intentando escapar,la ejecucion de aquella mañana seria triple...
Mientras rezaba me di cuenta de que un cabo habia kedado suelto en nuestro plan...como saldriamos de aquella ciudad lo bastante rapido?y que iba a hacer mi madre al convertirse en proscrita?
Mientras Nithy fundia los barrotes con cuidado de ni abrasar a mi madre,trace un rspido plan y se lo conte a Nithy,que imaginaba k me escuchaba.
-En cuanto los guardias lleven la cena a los presos,se daran cuenta de la ausencia de mi madre,no creo k tarden mucho porque ya es casi de noche,lo que nos da muy poco espacio de tiempo para salir de la ciudad.Si cierran la puerta de la muralla con mosotras dentro,estamos muertas.Asi pues...podras llevarnos volando a algun pueblo cercano donde tomar unos caballos o estaras demasiado cansada?
Espere a que terminara su trsbajo y me contestars mientras mi mente recalculaba la estrategia por si Nithy no podia volar...
Si nis quedabamos alli encerradas lucharia con mi madre hasta la muerte pero esperaba que Nithy pudiera salir volando sin peso si la cosa se ponia fea...
Me aferre a la empuñadura de mi espada y aprete los dientes preparandome para lo que se nos hechaba encima...

Simplemente asentí sin pronunciar palabra mientras las llamas inundaban mis fauces.
Se oían pasos a lo lejos, así que hice que mi fuego aún fuese más intenso y terminar cuanto antes.
De pronto la reja comenzó a ceder y empezaba a dejar un fino reguero.

- Si las cosas se ponen feas, trepa por mi cola y sube a mi lomo.

Entonces volví a derramar las llamaradas sobre el hierro esperando que terminase pronto.

- Ya está, puede salir - Mi voz sonó casi como un rugido, y ví como uno de los guardias se acercaba a la celda - ¡¡Alae!! ¡¡Prepara las armas!!

Esperé hasta que la madre de mi nueva amiga bajase por mi espalda, y me transformé en humana, sacando mi daga de la bota y entonándo en susurros la hipnotizante canción.
Como muchas otras veces, mi arma comenzó a palpitar de luz y fue remplazada por una espada con la misma serpiente enroscada en ella.
Agarré con mis dientes la empuñadura y volví a transformarme en dragón, manteniendola sujeta con la boca.

- ¡¡Vamonos!! ¡¡Subid rápido!! - Agaché el lomo y esperé a que subieran mientras el guardia se asomaba y daba la alarma.

Subi a su lomo y alli me reuní con madre.
Rapidamente atrabesabamos las murallas de la ciudad hacia la libertad.Tube un ataque de risa isterca por la tension acumulada:
-¡Lo hemos conseguido,por los seis no lo puedo creer!-y continue riendo-Nithy,¿te encuentras bien,puedes seguir volando un poco mas?
Mi idea era llegar a una arboleda cercana y continuar a pie hasta la fortalleza de Nurgon para descansar alli y dejar a mi madre al cuidado de los amigos que alli teniamos.
Asi ella estaria protegida y yo podria continuar recorriendo Idhun...
Esperaba que Nithy nos acompañara hasta la fortaleza, ya habia decidido como la compensaria por su ayuda,y no queria que se fuera rapidamente, solo queria poder despedirme de ella como estaba mandado....

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FdR:disculpa que sea corto, no estaba muy inspirada

Batí mis alas lo más rápido que pude mientras escuchaba la alarma en la prisión.
A pesar de todo nos habíamos salvado, y nuestro camino hacia la libertad estaba más cerca que nunca, además, ahora la madre de Alae estaría a salvo.
Exhalé un suspiro, que fue acompañado por un fino hilo de humo.
Sonreí aliviada, y traté de mantener la posición de mi cuerpo para que estuvieran bien seguras.

- Creo que tengo bastante fuerza aún para continuar algo más. - Cerré los ojos por un momento y estiré mis patas. - Agarraos fuerte, vamos a subir la velocidad. Es mejor que no sepan nuestra posición.

Entonces recordé algo que mi nueva amiga había dicho momentos antes, cuando comenzó toda la locura en aquel horrible lugar.

- Te equivocaste, Alae. - Sonreí con cariño y cogí todo el aire que me permitían mis pulmones. - Ni siquiera este pequeño favor que os hice a tu madre y a ti se puede comparar con la bondad del corazón de Yandrak. Jamás vi una criatura más hermosa que él.

En el horizonte, comenzaban a despuntar una pequeña concentración de árboles cercano a la fortaleza de Nurgon.

Nos alejabamos de aquella ciudad maldita ,y Nithy aumentó la altitud de su vuelo para evitar que detectaran nuestra posicion.
Allí la respiracion se agitaba pues escaseaba el aire y temia que m debil madre cayera,pero Nithy se mantubo estable.
La arboleda cada vez se veia mas cerca y decidi dejar sin responder el ultimo comentario de Nithy porque no me parecia oportuno que nos pusieramos a discutir sobre que dragon era el mejor en aquella situación.
Mi madre no habia dicho nada aun ,seguramente se estaba recuperando del shock,entonces la susurre algunas palabras al oido y ella asintio energicamente con una sonrisa, a ella tambien la parecia buena idea mi plan...
Cuando aterrizamos para continuar a pie, me abalance hacia un riachuele y bebi con ganas.Luego le dije a Nithy:
-Nos acompañaras a Nurgon y descansaras alli antes de continuar tu viaje,¿verdad?No quisiera que te marcaras sin antes despedirnos como esta mandado...
Levante la vista al cielo estrellado dando las gracias a los seis por habernos ayudado.Tome un mendrugo de an de mi equipaje y lo enterre en el suelo para honrrar a Wina.Mi cabeza seguia maquinando el acabado del regalo de Nithy mientras palapaba una vez mas mi saquito para asegurare de que su escama continuaba alli a salvo....
Despues me levante y las dige a mis dos compañeras:
-Sera mejor seguir...aun pueden alcanzarnos.

Al aterrizar, volví a mi forma humana sin pensarlo siquiera. Al fin estábamos a salvo, y tumbada en el suelo con los ojos cerrados esperé a que Alae terminase de beber. El viaje había sido muy intenso para todas, por lo que ví el cansancio en sus ojos.

- ¿Nurgon? - Posé mis manos sobre la frente y abrí los ojos, mirando las tres lunas que decoraban el cielo. - ¿Estás segura de que nos acogerán allí después de todo lo que se ha liado?

Cada vez que cerraba los ojos veía fragmentos de la escena sucedida hacía apenas unos minutos. Quizá ya no podía volver a mi casa, aunque mi forma humana no había sido revelada para ellos.

- Bueno, vayámos a donde sea, ¿qué haréis?

-Iremos a la fortaleza,mi madre ha fabricado armas para sus caballeron durante años,y antes lo hizo mi abuelo.Alli acogersn a mi madre y la daran trabajo en la herreria y nosotras pdremos descansar unos dias,nos daran comida y cama sin dudarlo,pues es su deber que los nobles no abusen de su poder,y el que encerro a mi madre lo hizo-alce la cabeza en busca de mi madre y la encontre lavandose en el arroyo,en voz mas baja continue hablando con Nithy-No la negaran asilo,pues se lo deben.De lo contrario deberiamos irnos al oraculo de Gantaz a servir como sacerdotisas,y eso para mi madre seria peor que la muerte...
Me retire un poco mientras mi madre se lavaba y Nithy descansaba sobre la hierbs.En aquella arboleda eleve una oracion a mis dioses y les prometi que si permitian que mi madre se quedara en la fortaleza,yo peregrinaria a cada oraculo y rezaria seis oraciones en cada oraculo.
Cuando temine me volvi a mi madre y a Nithy y las pregunte:
-¿Estais listas para continuar?

El poder de la naturaleza hacía que mis fuerzas regresaran con más rapidez, así que pronto estuve recuperada.

- Si el problema fuese que no encontrarais asilo en Nurgon, no tendríais que convertiros en sacerdotisas, podríais ir a mi casa sin problemas. Yo... Llevo bastante tiempo sola... - Aunque juré no volver a recordar todo mi pasado, una lágrima escondida se me escapó sin querer. - Pero bueno, si nos reciben hostilmente, sé algunas cosas sobre armas. Aunque, he escuchado que los caballeros de Nurgon son justos, y seguramente verán todo esto como una gran injusticia, a la par que nosotras.

Vi como Alae se retiraba unos metros y cerré de nuevo los ojos. La brisa era suave y a pesar de ser de noche, los árboles tapaban el aire que azotaba las hojas más altas. El sonido era realmente reconfortante, y ya me sentía mucho mejor. De pronto, sentí un pequeño pinchazo en mi vientre, pero decidí no avisar a nadie y al volver mi nueva amiga, me puse en pie.

- Yo estoy lista para viajar de nuevo. - Sonreí como tantas otras veces y guardé mi arma, que al acabar todo aquello, había vuelto a su forma natural, y que había reposado sobre mi pecho desde que paramos.

Nos cubrimos los rostros con las capuchas de las capas y continuamos andando.
Caminabamos por un camino empedrado, con algunos arboles a los lados. Solo nos alumbraban la luz de las tres lunas.Estaba tan agotada que no podia hablar.
Cada vez la fortaleza aparecia mas grande ante nuestros ojos.
Cuando llegamos a la puerta de la fortaleza,dos caballeros nos salieron al paso:
-Alto¿Quien va?-nos pregunto uno, pero suavemente.
-¡Gracias a los seis!Kostos soy Alae,vengo con mi madre y una amiga, tenemos que hablar con el maestro Taiks
Mi viejo amigo corrio a buscar al maestro a sus aposentos mientras su compañero nos invitó a pasar.
Solo deseaba una cama,un camastro o solo un suelo no muy frio para dormir.
El maestro bajo a recibirnos ,a mi madre y a mi con un abrazo y a Nithy con una reverencia.
-¿Que os ocurre queridas?Espero que podamos resolver vuestro problema.

Hice otra pequeña reverencia en modo de respeto.

- El cobijo que ofrece la fortaleza de Nurgon siempre ha sido respetable. - Observé con detenimiento al hombre que se mostraba ante nosotras y después miré al cielo, en el que aún destellaban las estrellas. - Hemos recorrido un gran camino a pie, y otro viaje aún más largo volando. No hemos tenido una experiencia agradable, a decir verdad, ¿sabe usted? - dirigí mi vista entonces al maestro. - Espero que mis compañeras de viaje puedan encontrar estancia entonces ahora. Creo que ya están al límite de sus fuerzas.

Era un gran lugar, pero bajo la luz de las lunas se mostraba algo lúgubre, y se teñía de sombras nocturnas. Aún así, se podía respirar la disciplina de los caballeros que allí se instruían.

- Por mí no han de preocuparse. Esperaré a que ambas estén completamente recuperadas y me aseguraré de que encuentran un lugar seguro donde vivir a partir de ahora. - No era forma de dirigirme a un superior de tal modo, pero mi preocupación por madre e hija me hacía parecer aún más brusca. No sabía de quién podía fiarme, a pesar de parecer que aquella gente eran amigos suyos. - No me gustaría que sufrieran aún más de lo que ya lo han hecho.

Pose mi mano sobre el hombro de Nithy para que se tranquilizara, todos estabamos tensos y cansados pero el maestro era un hombre de fiar.Cuando mi padre nos abandono el maestro pretendio a mi madre y la pidio la mano y a pesar del rechazo de mi madre, aquel hombre continuo apollandonos y animandonos para que superaramos aquel mal momento.
-Tranquila Nithy,seguro que el maestro entendera nuestra delicada situacion.-Entonces procedi a relatarle al maestro nuestra aventura y lo ocurrido a mi madre.
Cuando termine el maestro se atuso la barba mientras decia:
-Entiendo,entiedo....Eso ha sido una terrible injusticia...-Se acerco a mi madre y la abrazo amistosamente-No temais,queridas.En esta forlaleza defendemos la justicia por encima de todo,y por descontado que aqui obtendreis asilo,provisional y permanente s asi lo deseais.Alae, tu y tu madre podeis ser de mucha utilidad en la forja..De momento creo que deberiamos dormir todos un poco y mañana veremos que hacemos con ese noble..tan poco noble, si me permitis el chiste.
Sonrei ante aquel hombre que siempre me habia tratado como a una hija y me diriji hacia las habitaciones, donde el servicio habia preparado tres camas.
Cuando mi cuerpo al fn reposo en el fino colchon, no tarde ni diez segundo en rendirme al sueño...

Seguí a Alae en silencio. Aunque para ellas fuese un buen hombre, yo no confiaba en la mayoría de los humanos sobre todo si eran hombres.

Al llegar a la habitación esperé junto a la puerta hasta que mi compañera cayó presa del sueño. Entonces, me dirigí a una de las camas, y a pesar de mi cansancio, unicamente me senté y observé la puerta fijamente por si acaso alguien venía.
Aunque los caballeros de Nurgon fuesen honrados, no pondría en duda que ahora nuestras cabezas tenían un precio, y había gente que se dejaba guiar por el dinero.

Sumida en mis pensamientos no evité dedicarle alguno a Yandrak. Entonces entendí, o quise entender que el cuidaría de mi.
Decidí descansar un poco más tarde ahora que estaba respaldada por él, pero por el momento permanecí sentada.

Cuando desperte por la mañana mi madre ya habia hablado con el maestro.Nithy se veia tensa a mi lado...
Susurre al oido de mi madre:
-¿?Esta preparado su regalo
Ella contesto en igual tono:
-Por supuesto querida, hoy a mediodia lo tendre todo resuelto, ademas el maestro a accecido a darme proteccion y si quieres puedes quedarte.
-Aun no estoy lista para ingresar en la orden, ademas...les e prometido algo a los dioses...
Midre asintio sin mas preguntas instandome a que me llevara a Nithy a pasear para que ella pudiera terminar su trabajo.Me volvi hacia la dragona:
-Nithy,porque no salimos a dar un paseo...mi madre y yo estamos definitibamente a salvo y quisiera...despedire y que hablaramos del futuro...
Sali de la habitacion a sabiendas de que me seguiria,me moria de ganas de que su regalo estuviera terminado.
Salimos de la fortaleza y caminamod tranqueilamente por los limites de Awa:
-Y...¿?Que haras de ahora en adelante?¿Volveras a tu tierra?

Cuando Alae despertó yo aún no había comenzado a dormir, pero tampoco quise hacerlo. Respiraba la esencia de la guerra, que se desprendía de las paredes y me hacía recordar mi oscuro pasado. También había estado pensando sobre el tema que me volvía loca desde la desaparición de mis amigos.
Sin embargo cuando arrojé la pulsera pánico del miedo ella volvió a mi. También lo hizo cuando la rompí, regresando intacta, y por todo esto no podía entender que esta vez no me hubiese perseguido, aunque podía ser mejor así, solo nos habría atrasado. Quizá esta vez no volviera porque realmente dejé mi amor atrás.

Estaba tan sumida en mis pensamientos que no me fijé en la conversación por susurros que Alae y su madre tenían ante mi, pero asentí cuando ella me ofreció salir. Me vendría bien, comenzaba a asfixiarme ahí.

Cuando mi nueva amiga formuló su pregunta, yo no estaba segura de poder responder con seguridad, así que cerré los ojos con la cabeza alta y inhalé una gran bocanada de aire mientras sonreía con la sonrisa despreocupada que me caracterizaba.

- Quién sabe lo que los dioses guardan para mis próximos días. Creo que seguiré mi camino sin un rumbo fijo en busca de aventuras. - solté una carcajada mientras añadí - Creo que después de todo me gustan estás cosas. Me hacen sentir viva. Me hacen sentir que no me quedé sola después de todo. - abrí los ojos y mi expresión cambió. - Cuándo uno se siente tan solo, tan vacío, tan muerto, necesita algo que le haga volver a nacer, aunque solo sea durante un escaso periodo de tiempo. Algo que te haga pensar que merece la pena seguir viviendo para luchar por aquellos que perdiste.

Intenté volver a sonreir, pero solo conseguí derramar una lágrima que rápidamente sequé rezando en silencio a los seis por no haberme vuelto de nuevo tan vulnerable.

Cuando Alae despertó yo aún no había comenzado a dormir, pero tampoco quise hacerlo. Respiraba la esencia de la guerra, que se desprendía de las paredes y me hacía recordar mi oscuro pasado. También había estado pensando sobre el tema que me volvía loca desde la desaparición de mis amigos.
Sin embargo cuando arrojé la pulsera pánico del miedo ella volvió a mi. También lo hizo cuando la rompí, regresando intacta, y por todo esto no podía entender que esta vez no me hubiese perseguido, aunque podía ser mejor así, solo nos habría atrasado. Quizá esta vez no volviera porque realmente dejé mi amor atrás.

Estaba tan sumida en mis pensamientos que no me fijé en la conversación por susurros que Alae y su madre tenían ante mi, pero asentí cuando ella me ofreció salir. Me vendría bien, comenzaba a asfixiarme ahí.

Cuando mi nueva amiga formuló su pregunta, yo no estaba segura de poder responder con seguridad, así que cerré los ojos con la cabeza alta y inhalé una gran bocanada de aire mientras sonreía con la sonrisa despreocupada que me caracterizaba.

- Quién sabe lo que los dioses guardan para mis próximos días. Creo que seguiré mi camino sin un rumbo fijo en busca de aventuras. - solté una carcajada mientras añadí - Creo que después de todo me gustan estás cosas. Me hacen sentir viva. Me hacen sentir que no me quedé sola después de todo. - abrí los ojos y mi expresión cambió. - Cuándo uno se siente tan solo, tan vacío, tan muerto, necesita algo que le haga volver a nacer, aunque solo sea durante un escaso periodo de tiempo. Algo que te haga pensar que merece la pena seguir viviendo para luchar por aquellos que perdiste.

Intenté volver a sonreir, pero solo conseguí derramar una lágrima que rápidamente sequé rezando en silencio a los seis por no haberme vuelto de nuevo tan vulnerable.

La sonrei mientras caminabamos trankilamente y continuamos hablamos:
-Claro...lo divertido del futuro es la sorpresa k nos depara,yo aun me kedare unos dias mas x aqui hasta que mi madre se instale y luego comenzare una peregrinacion...les prometi a los dioses k si esta lokura salia bien visitaria todos los oraculos de Idhun,y eso es lo que hare...¿Cuando partiras Nithy?
Los soles ya estaban en lo mas alto del cielo y di la vuelta caminando de nuevo hacia la fortaleza.Esperaba que mi madre hubiera terminar el regalo de Nithy a tiempo...
Sonrei con impaciencia deseando que llegara el momento de ver la cara de sorpresa de mi amiga.

Volví a sonreir de nuevo.

- Creo que partiré hoy mismo. Si necesitas algo más, creo que sabes que puedes contar conmigo siempre que lo necesites. - Alcé los brazos y los coloqué tras mi espalda. - Creo que ahora que estoy algo más tranquila descansaré un poco antes de partir. No sé cuanto tiempo estaré viajando, así que es mejor el tener algo de fuerzas para el camino, a pesar de los dragones ser seres tan fuertes, los humanos continúan teniendo esas carencias que los hace especiales.

Mis ojos estaban tan empañados como mis recuerdos, pero aún así intenté parecer lo más feliz posible ante ella.

- Voy a resolver varios asuntos antes. He tenido problemas con una... "pulsera" y quiero ver que pasa al final con ella.

Al decir esta palabra, sin entender muy bien por qué, mi muñeca se volvió de nuevo pesada y me desmayé casi sin darme cuenta.
A pesar de seguir inconsciente, en mi mente parecía tan despierta como siempre que tenía aquellas visiones. Yandrak volvía a sonreírme allí y me hablaba.

- ¡No! ¡Vete! ¡Ya saldé mi deuda contigo! ¡Quiero una nueva vida!¡No quiero continuar siendo presa de mi pasado! - De mis ojos comenzaron a brotar lágrimas y sin darme cuenta agarré la garra del dragón.

- No me iré, y lo sabes.

Volví a abrir los ojos y las imágenes se habían esfumado de mi cabeza. Yandrak había vuelto a desaparecer.

- No te preocupes. Estoy bien.

La blanca dragona cayo al suelo antes de que yo siquiera me girase del todo. Rspitamente me arrodille junto a ella y...desperto afirmando que estaba bien.
-Diesculpa-la dige mientra se incorporaba lentamente-ha sido culpa mi por no dejarte desayunar...
Ambas mentiamos.Ella no estaba bien y yo sabia que el desmayo no lo habia ocasionado el hambre.
Cuando miraba a Nithy a los ojos veia una oscuridad contrnida similar a la de mis ojos.Las dos conociamos la sensacion de tener un pasado oscuro y ambas debiamos seguir nuestro propio camino y enfrentarnos a nuestros deminios...
Ya habiamos llegado a la fortaleza y le indique que me siguiera mientra caminaba hacia la herreria.
Alli estaba mi madre trabajando y me indico con un gesto donde esta lo que buscaba.Lo cogi y se lo entregue a Nithy:
-Esta espada la ha fabricado mi madre con ls escama que te extirpe asique tu eres su dueña.Gracias por todo Nithy.-La dige,y luego la abrace.

Fingí una sonrisa de nuevo para hacer ver que estaba bien. Las dos sabíamos que no lo estaba, pero debía mostrar mi apariencia despreocupada. Era algo así como mi instinto de supervivencia.
El qué hacer con la pulsera lo pensaría después.

Caminamos hasta la fortaleza de nuevo, y en todo el trayecto me mantuve sumida en mis pensamientos, ajena al mundo. No quería mostrarme desagradable ante Alae, pero aún así, no podía entender nada de lo que me estaba pasando.

Al llegar, ella me tendió una espada, forjada con una parte de mí. Quizás esa espada pertenecía a su madre, pues yo había dado mi escama para salvarla, y aún así, sentí mi propia esencia palpitando dentro del arma.

- Yo... - Las palabras no me salían y por primera vez en muchos años sonreí de nuevo, sin fingir y sin ocultar mis verdaderos sentimientos. - No sé que decir en realidad. Es algo que no me esperaba, y me gustaría poder hacerte un regalo así de importante como el tuyo... Y sin embargo... - Puse ante mí mis manos y las examiné con cuidado. En ambos dedos índice reposaban dos anillos exactos. Ambos tenían una especie de esmeralda verde intenso que relucía a la luz de las forjas. Palpé el de la mano izquierda y después me lo quité, extendiendo mi mano hacia Alae para que lo cogiera. - Estos anillos no son gran cosa, pero... tienen un poder parecido al antiguo Shiskatchegg, cuyo dueño fue el gran Kirtash. Es una forma de estar conectados, así, si alguna vez vuelves a necesitarme solo tendrás que llamarme. - Lo coloqué en la palma de la mano de Alae y volví a sonreir. A pesar de haber añadido ese pequeño comentario sobre Kirtash, quería que un dragón alabase sus obras, por lo que no me arrepentí de ello.- También es una forma de recordar que seré tu amiga.

Me paré a pensar durante unos instantes. Iba a explicar el por qué de mis extraña tendencia hacia las serpientes, a pesar de ser un dragón, pero lo pensé mejor. No era el lugar adecuado.

- Y sé que puede parecer algo raro que todo lo que tengo mantenga relación con los shek, pero... - casi riendo acaricié la espada. - Ahora tengo que aprender a usarla.