Travesía[¡Libre!]

Off: Creo que pondré aquí el tema porque será un viaje por Celestia y pasaré por lugares que no son ni Rhyrr ni Haai Sil.
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Una vez desde arriba, descubrí que Celestia era bastante plana, pero resultó que se trataba de un altiplano, no era tan lisa como yo creía. Rainbow se removía en el arnés, pero yo no lo iba a soltar por nada. Me detuve junto a un arroyo y le pedí al Haai que se marchara, le di las gracias y caminé con Rainbow saltando sobre la hierba.

Me dirigía a un pueblecito llamado IdHaai, Primer Haai porque se decía que el primer Haai había aparecido allí y había hecho su nido en el Árbol. Era un pueblo que vivía en los grandes árboles de un bosquecillo y que coronaba un árbol muy alto. Todos los troncos estaban llenos de pasillos, escaleras y casas. Allí había sólo celestes y feéricos, y mestizos de ellos, porque la pequeña población de Haais no molestaba como en Haai Sil y era un lugar muy agradable.

Era un lugar donde cualquiera era bienvenido, aunque fuera szish o shek. Por eso, aun sabiendo que muchos de los feéricos sabrían si me miraban a los ojos que era un unicornio, decidí pasar la velada allí. Con unos pocos pelos de unicornio que había vendido muy bien en Haai Sil, podría pagar hospedaje si era necesario, aunque pensaba pasar sólo la noche. Nada más entrar, la saludó un semi-feérico de piel entre tintes verdosos y azules, con un ojo celeste, de color violeta y otro feérico, negro completamente. Él debía tener más de celeste que de feérico, porque no pareció darse cuenta del ser que latía en mi interior.

-Bienvenidos a IdHaai-saludó mirando con ternura a Rainbow-. ¿Visitante?

-Ocasional, vengo a pasar la noche-dije con entusiasmo-.

-Aaah, tenemos un albergue para gente que busque pasar algunas noches-dijo amablemente-. Aquí el dinero no se cotiza y a los celestes no nos interesa mucho, se puede pasar una noche sin pagar. Es en el Árbol, ven.
Me llevó hasta la base del árbol y me miró con una gran sonrisa.

-Los puentes y ascensores son sólo para los feéricos-explicó-. Hasta los semi-celestes podemos levitar, así que nos desplazamos así. Hay lugares a los que los feéricos no pueden llegar pero nosotros sí, aunque procuramos que puedan hacerlo. La puerta está arriba, si no es mucha molestia, podemos subir levitando. Aquí los feéricos pueden llegar, pero es más difícil de acceder.

Asentí y traté de rebuscar el modo de hacerlo. El lugar no tenía ningún obstáculo y con mi poder de viajar con la luz podía llegar en instantes, pero mejor no llamar la atención era mi prioridad, así que pronto descubrí que levitar era maravilloso: no era como volar con alas o sobre un Haai, sino mucho más versátil. Podía hacerlo sin ningún problema y pronto estuvimos frente a un rellano pequeño con una puerta de madera. No estaba muy alto, pero yo llevaba a Rainbow de nuevo sujeto en el arnés. Esta vez, le gustó la sensación mucho más. Él parecía querer volar pero yo no sabía cómo complacerle. Quizá pudiera resolver el enigma pronto y darle un buen sueño.

El semi-celeste llamó a la puerta suavemente. Yo, mientras, miraba hacia abajo. El lugar se trataba de un simple resto de rama gruesa, sin varandillas, con un hueco en el mismo árbol, de forma natural, donde había una puerta de un trozo macizo de madera. Se notaba que los feéricos cuidaban de que no se hiciera daño a los árboles, porque todo era natural, curioso, pero natural. Una feérica más anciana, que se mimetizaba perfectamente con el árbol, abrió amablemente.

-Damar-saludó al semi-celeste con una sonrisa-. ¿Una visitante?

-Soy visitante por una noche-respondí sonriendo-.

-Aaaah, sí tenemos unas habiaciones libres-dijo alegre-. Hay una que está en una plataforma y tiene una cúpula y el suelo transparentes. Está cerca de la cima del Árbol, pero creo que es la más cómoda para una noche.

Tendrás que ir tú sola, no había ningún camino para los feéricos y por lo tanto no hicimos ninguno con las maderas que se tienen que usar para que resistan. Dime tu nombre y el de tu acompañante-sonrió a esto último-.

-Yo soy Maylu...Mayaris, soy Mayaris-dije corrigiéndome y evitando que me mirara a los ojos insquisitiva-. Él es Rainbow.

-Sabrás que se puede caer y que nada podremos hacer por él-dijo la feérica-. Le podemos aplicar un conjuro y para que pueda tener un par de ayuditas y que aprenda a moverse contigo por lugares como este.

-¡Oh, eso es muy caro y yo no quiero molestar...!-exclamé-.

-Nada, nada, nosotros te lo haremos pero no queremos nada a cambio, es una vida lo que está en juego-dijo la feérica. Los feéricos apreciaban la vida por encima de todo y la entendí-. Déjanoslo ahora y te lo llevará alguien al cuarto.

-Bueno...esto...-sabiendo que no podría discutir en esa cuestión, me resigné-. De acuerdo.

Saqué a Rainbow del arnés y se lo presté. Enseguida desapareció por un corredor en el interior del árbol y Damar me guió por una galería hacia arriba, levitando de nuevo. Me entontré con una puerta(esta vez sin rellano)que daba a una habitación donde no había paredes, techo ni suelo.

-No se puede ver desde fuera-informó Damar-, por si te preocupa. Ponte cómoda.

Salió de la habitación. Lo único que se veía de las pareces era la pueta, pero yo podía saber donde estaban las paredes aunque no las veía, y me senté en la cama dejando a un lado mi zurrón. Entonces vi, abajo, entre el gentío, a alguien conocido, y bajé hasta la misma entrada, levitando con cuidado hacia abajo, para recirbirle.

¡Era Pétalo! ¿No estaba estudiando en Derbhad, según me había dicho? Seguramente aún no habría podido ir, apenas habían pasado algunos días, pero parecían una eternidad. Como yo estaba un poco alzada del suelo, para verla entre el follaje,
-Hola, cuanto tiempo.-me dijo sonriendo. El pequeño Choco, algo más grande, estaba sujeto entre sus manos.
-¿De verdad?-pregunté haciéndome la sorprendida-. A ver...uno, dos, tres, cuatro, cinco...cinco días. ¿Eso es mucho?-sonreí-. ¿No ibas a ir a estudiar a alguna Torre?-inquirí curiosa-.

Llegue cuando era por la noche,Thunder parecia cansado asi que decidi pasar unos dias en un hostal de IdHaai.Deje a Thunder en las cuadras y entre en el hostal.
-Hola vengo a pasar unos dias,y dejare a mi mascota en las cuadras.-Dije a la feerica que me recibio.La feerica me condujo hasta mi habitacion y cuando se marcho,sali de la habitacion en direccion a la calle.Habia mucha gente paseando por el pueblo,pero aun asi quise pasear.Antes de irme fui a las cuadras para decirles que cuidasen del el con mucho cariño.Al salir,via una celeste,poco mayor que yo levitando por encima del gentio.Hacia mucho que no levitaba,pero no quise hacerlo.Me interne en el bosque y vi que habia un lago.Decidi mojarme los pies y asi lo ize.Hacia mucho tiempo que no me mojaba los pies y aquello me sento bien.Cuando volvi,no quise cenar y me quede en el pasillo de habitaciones pensando en muchas cosas.

-si lo estaba pero me e tomado unas vacaciones no soporto estar tanto tiempo en un sitio asi que decidi salir un poco por el mundo sonrei alegre de ver otra vez a mi amiga

-Sí lo estaba pero me he tomado unas vacaciones, no soporto estar tanto tiempo en un sitio así que decidí salir un poco por el mundo-respondió sonriente-.
Sonreí al mismo tiempo y recibí entonces la noticia de que había un pequeño percance con Rainbow, según me dijo un celeste. Suponía que no podía ser tan fácil, así de pronto, por lo que suspiré y me despedí de Pétalo para ir a ver qué pasaba. Sorprendentemente, el edificio no era el mismo en que había visto a la anciana feérica, sino uno abajo del todo. Entré con lentitud, sola, y me pregunté si a Rainbow le dolería lo que fueran a hacerle.
El celeste me llevó a una salita donde Rainbow estaba tumbado en una mesa, muy cómodo. Saltó hacia mi y cuando fui a cogerlo vi con estupefacción cómo se quedaba flotando unos momentos antes de caer bruscamente sobre mi preparado regazo.
-Se nos ha acabado el elemento que necesitábamos justo cuando estábamos a punto de sellar el Vínculo y lo que teníamos planeado-informó la feérica desde un lado de la sala-. Faltan tres de ellos, pero están en Trask Ban, Nandelt y la Cordillera Cambiante, y no podemos conseguirlos de ningún modo. Pero tampoco podemos dejarlo a medias aunque ya no hace falta más que dejar que lo coma.
-Queréis que lo haga yo-completé-. Puedo, puesto que mi ruta pasa por esos lugares, aunque no sé qué es el Vínculo.
-Eso lo sabrás si tienes suerte-dijo la feérica con una sonrisa-. Ya que vas a Nandelt, supongo que pasarás por Awa, y entonces podrás tratar de buscar a la semi-feérica Daina. Ella te lo dirá, yo prefiero dejarte con la sorpresa.
Me dijo algunas cosas más dándome suerte para el viaje y abandoné la habitación, sonriendo porque no había podido ver mis ojos. Rainbow iba caminando a mi lado, pero a cada zancada demasiado larga se elevaba del suelo más de un metro y medio, por lo que decidí cogerlo en mis brazos. Pasé junto a otra celeste y saludé con un asentimiento de la cabeza. Seguí mi camino y busqué a Pétalo hasta casi chocar con ella, saludándola entonces con alegría.
-Disculpa-dije a modo de explicación por mi falta-. Rainbow tenía que volver conmigo.
La miré con alegría y sonreí al felino, que olisqueó con curiosidad a Choco y agarició con la cabeza el hombro de la feérica.
-Él también se alegra de volver a verte-dije sonriendo-.

Off: Pétalo, tienes que esperar a Lisabet, es su turno.

Os voy a tener que mover el rol porque NO se puede rolear en el foro principal de las regiones, tendreis que elegid uno, asi que elegidlo o cierro el tema!!

No dormi mucho aquella noche.Cuando sali estaba la misma celeste del dia anteriro ablando con una feerica.Aquella feerica tenia un colibri y la celeste un leopardo blanco.
-Que monada de leopardito.-Pense mientras sonreia.Tenia intencion de sacar a Thunder a pasear.Pase cerca de aquellas chicas las dirigi un breve "Hola" junto con una sonrisa.Tenia ganas de tumbarbe en el prado y que la hierba me acariciase la cara.Me daba la sensacion de haber visto los ojos de la mujer celete.Cuando llegue a las cuadras,saque a Thunder y me dirigi al prado.Note que Thunder estaba mas feliz de lo normal asi que pasamos poco tiempo en el prado para que volviese a las cuadras con su nueva amiguita.Le deje en las cuadras y me dirigi al comedor dispuesta a cenar.

Off Rol: ¿Podría ser movido a Haai Sil? Como al menos nosotras dos salimos de allí...

Claro, ahora mismo lo muevo

Off: Lisabet...se supone que no había pasado aún un día O.O acababa de llegar más o menos a la tarde.
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Pétalo acarició a Rainbow con la mano y éste se la lamió gustoso.
-Qué tal pequeño-dijo Pétalo-. No te preocupes-sonrió-.
Dejó a Choco en su hombro y entonces me di cuenta de que casi era de noche y que sería la hora de cenar pronto.
En el árbol se escuchaba la algarabía de la gente bajando a fuera para cenar.
-Es la hora-dijo la feérica recepcionista-. Siempre usamos una cúpula por los Haais, pues cenamos fuera.
Me senté en la mesa que habían transportado hasta allí un par de magos y sobre la que había comidas vegetales y sobre las que se alzaba una cúpula transparente.
-Esto me suena-dije sonriendo picaronamente a Pétalo, recordando cuando, unos días atrás, nos conocimos-. Por cierto, yo sólo voy a pasar aquí un día como mucho, pero, ¿y tú? ¿Vas a pasar algunos días aquí?

negue con la cabeza
-ya te he dicho que me gusta viajar si no me aburro
dije mientras hacia crecer una flor para que choco pudiera comer cuando lo consegui choco pio agradecido

Off:Paso mi turno hasta que se pase el dia y perdon por adelantarme jeje

Pétalo me dijo que se aburría si se quedaba en un mismo sitio y yo asentí. Precisamente por eso me había hecho híbrida. Así que tras cenar, volví a mi habitación dándole las buenas noches. Rainbow estaba algo agitado por todo el movimiento, pero se relajó y pudimos dormir hasta que de nuevo llegó el día.
Recogí mis cosas y fui a saludar a Pétalo, cuando la misma celeste de la noche anterior nos saludó sonriendo. Asentí sonriendo a mi vez y pensé en Rainbow, que "levitaba" a unos centímetros del suelo. Lo recogí y lo retuve entre mis brazos, donde se acomodó tranquilamente.
-Yo me voy a ir en un rato-dije a Pétalo en tono algo nostálgico-.

claro asenti no te preocupes cogi a choco y me sente cerca de un arbo
-creo que yo neditare sobre algunas cosas.