Humedad por el camino....[Privado, Kumiko y Lurr y Zahira (recien unida), se aceptan peticiones para unirse]

Kumiko se mordió un poco el labio inferior inconscientemente mientras cuidadosamente le empezaba a bajar la capucha. Su pelo color azabache contrastaba con esos ojos que parecían serenos y brillantes y su cicatriz en los labios... sonrió un poco.
- ¿Es que acaso intentaste besar a alguien y te mordió?- preguntó pícara tocándole suavemente y efimeramente los labios con la punta de sus dedos.
-Queía verte la cara porque soy curiosa, ¿eso no basta? y sobre lo de hablar.. no sé. Me gusta el silencio. - Hizo una pausa y cerró los ojos.- ¿Lo oyes? Es la vida lo que oyes.- dijo refiriendose al ulular del viento y al sonido que ella podía escuchar de cuando las hojas caían y tocaban el suelo.

Pues demasiado curiosa eres....y sobre la cicatriz de los labios no fue así.....prefiero no recordarlo *después me gire y la mire, estaban casi por así decirlo muy poco alejados, no podría levantar el brazo ¿por que? por que la tocaría....* Si, el silencio es maravilloso.... *suspiro pero me quede mirándola, mientras escuchaba los sonidos, el viento rozando su cuerpo, el sonido de los pájaros, el sonido de animales cazando....todo era maravilloso pero a la vez horrible* ¿Sabes? La curiosidad mato al gato. *La sonríe, recordando lo que dijo sobre que es curiosa, después cerré los parpados unos pocos minutos*

La chica abrió los ojos cuando él acabó de hablar y observó que él también los tenía cerrados, una pequeña sonrisa surcó sus labios al observarle.
-Si... ya sabía que la curiosidad mató al gato, pero todos tenemos que morir algún día, asique prefieron morirme sin la duda de la curiosidad. ¿No crees?
Kumiko se estiró y luego se agazapó un poco para cubrirse más con aquella piel. Las fuerzas estaban volviendo a su cuerpo pero unidas a ellas el cansancio también.Puede que ahora la tensión con él hubiera disminuido pero no quería perder la consciencia durmiendo mientras él estaba tan cerca de ella.

*Después abrió los parpados y la miro* Deberías dormir un poco, yo si quieres me iré para que descanses mejor. *al levantar el brazo sin querer toco la mejilla de Kumiko pero ni se entero o eso aparenta mientras se apartaba un mechón del pelo que tapaba parte de su vida y mire a la mujer* Tienes razón, es mejor no morir con la curiosidad, total es mejor ser curioso o curiosa, es mas divertido. * Sonríe, mostrando sus dientes blancos y después cerro los parpados* ¿Sabes? Eres una mujer muy extraña. *Después volvió a posar el brazo en la hierba, esta vez no la toco* ¿y por que eres tan curiosa? supongo que de nacimiento.

-Hmm.. pero no tengo sueño.- mintió, y para dar más fe a sus palabras se sentó mejor , apoyándose más en el tronco. Abrió muchos los ojos cuando notó como una de las manos de él la rozaba la mejilla. Le miró atónita esperando que él dijera algo ante ese roce, pero él parecía que no se había dado cuenta. Este hecho hizo que la cabeza de Kumiko se ladera con curiosidad.
- ¿Soy extraña? ¿Por qué? ¿Por no temerte? ¿Por no ir de doncella en apuros? - Kumiko se pasó los dedos por su pelo oscuro.- He conocido a algunas chicas... todas tan buenas.. tan educadas... ¿Es que todas son asi?

Esas mujeres que digamos son aburridas, prefiero a las que no me temen ni nada, y prefiero que no llegases de dama en apuros, no te habría salvado, es mas fijo que ayudaría al que te estaba poniendo en apuros. *Todo sincero el, y todo un cabronazo cuando se lo propone, despues se sento al lado de la mujer y el la miro a sus ojos, como si quisiese ver que pensaba esta chica, despues coloco las manos en sus rodillas (las mias) y la siguio mirando, como si no ocultase secretos para el, como si el supiese todo* y algunas mujeres son así si.... *Una sonrisa apareció en su rostro al acordarse de algo, ¿Donde estaría la semiyan? Era muy buena en la cama, dije pensativo*

La chica observó y notó que él se sentó todavía más cerca de ella y eso la inquietó. Su manera de hablar, aunque dura, parecía ocultar algo... ¿interes quizas?
Kumiko frunció el entrecejo... ¿él tenía.. interés.. en ella? El ver sus ojos mirándola tan de cerca y de esa manera hizo que se quedara en blanco, no sabía que hacer a continuación. La chica empezaba a ponerse nerviosa y eso seguramente él lo notaría. Intentando alejarse de esa mirada hipnótica.
Como estaba sentada movió sus brazos hacia atrás intentando alejarse un poco de él pero el tronco resbalaba y eso hizo que perdiera algo de equilibrio y se resbalara completamente hacia delante. Haciendo que el espacio que había entre ellos disminuyera tanto que si ella levantara la cabeza vería la cara de él desde una perspectiva un poco más baja.
- ¡Mierda!- casi gritó mientras intentaba volver a alejarse. Pero no sabía si él la dejaría o no.

*La miro y no hizo nada, permitió que se alejase* No tienes por que asustarte, solo estoy charlando contigo, ni que fuese un asesino o un psicópata. *una sonrisa apareció en su rostro, mientras miraba todos sus movimientos....como hablaba, como se movía, como se asustaba, como le temía y de todo, era una mujer interesante eso si y seguramente podría pasar un buen rato pero a el le daba igual, mientras la seguía mirando, atento a sus movimientos, como cual guerrero vigilando a un posible enemigo, aunque en sus ojos había un pequeño destello de diversión* y tranquila que no te haré nada, no soy ese tipo de personas.

Mientras se alejaba le observó todavía más detenidamente.
-No.. pienso.. nada malo.. quiero decir.- dijo parando de titubear.- nunca he hablado tanto tiempo con una persona. ¿Por qué sigues queriendo estar conmigo de conversación? Te recuerdo... que antes me has retado con matarme
Kumiko, aunque intantara mostrar una postura fría su nerviosismo se hacía notar cuando empezó a tocarse mucho el pelo y a dejar perdidos sus dedos dentro de su melena oscura y lisa.

*La mira y acerco su rostro al de ella* Yo no mato sin motivo. *Dijo en un tono frió y maligno, mientras volvía a separar su rostro que casi tocaba el de ella y se apoyaba en el árbol* y sobre eso, es cuestión de acostumbrarse para hablar tanto tiempo con una persona y sobre eso, hace tiempo que no charlo con nadie y no hace mal charlar con una mujer ¿no crees? *Una sonrisa apareció en su rostro, una sonrisa maligna mientras miraba a la mujer, la verdad es que su piel haría un bonito cojín pensé, pero la dejaría en paz....* y dime....¿No quieres hablar conmigo? Si eso guardare silencio...

Kumiko cogió aire al notar su cara tan cerca de la suya.
- ¿A que juegas?- dijo levantandose poniendose de pie mientras le miraba desde arriba.
- No es que no quiera hablar contigo... es que no se como va a continuar esto. No se si me estas tramando una trampa como una araña que te envuelve con sus hilos o estas esperando a algo.. o simplemente quieres charlar.. Me confundes.
Kumiko pasaba su peso de una pierna a otra mientras levantaba la cabeza y miraba al cielo mientras tambien ponía sus brazos detrás de la espalda. Apoyándose asi en el arbol.

Solo estoy charlando con vos. *Una sonrisa apareció en su rostro y vio que se apoyaba en el árbol donde estaba el* y bueno, ¿Que vas a hacer despues? ¿Te vas a ir? ¿Me vas a matar? *bromea sobre lo de matar, esta seguro que esta mujer no podria contra el, si quisiese podria matarla o hacer que ella obedeciese sus deseos, pero seria aburrido, muy aburrido y eso no le interesaba, le gustaba esperar como cual aguila y despues bajar para devorar a su presa* Eres una chica interesante eso no lo niego. *Sonríe al ver su cara, la verdad es que no lo pasaría mal con ella* Um que frió ¿no?

-No mato por gusto... pero si me tientas o me amenazas tendré que hacerlo. - dijo mirando para abajo.
Kumiko omitió lo de "ser una chica interesante" y contestó a lo del frío.
-Hmm.. no mucho.- dijo quitandose la piel con la que se cubría dejandola caer encima de él.- ¿mejor así?

La chica se alejó unos pasos del árbol y se estiró un poco. Notaba las piernas todavía algo tambaleantes pero gracias a la comida y al agua podría resistir un poco hasta encontrar algún sitio donde dormir.
-Ya va siendo muy de noche... quizás debería irme.- dijo dandole la espalda mientras observaba el bosque.

*la mira* Ya, supongo que no matas por gusto, y si se hace de noche, si quieres irte. *Guardo la manta, doblándola y guardándola en su mochila mientras miraba a la mujer, después se levanto y se acerco a ella* ¿Pero a donde vas a ir? *La sonrie, mientras se coloca la capucha, mientras se mantiene muy cerca de ella, mirando su rostro, sus cabellos, esos ojos, era una chica pero que muy muy interesante, y muy curiosa, algo que le interesaba, sin duda podria divertirse con ella mucho mas que con la semiyan* ¿Quieres compañía hasta al lugar donde vayas a dormir? *Dice, fingiendo preocupación, era un buen actor*

Kumiko dio un pequeño respingo cuando notó que él también se levantaba y se colocaba justo a su lado, si ella estuviera más cerca de él notaría su aliento. Se giró hacia él y tras pasarse la mano por el cuello como si estuviera estirando la nuca. Dijo:
-No sé donde dormiré ni tampoco sé si voy a dormir hoy o la próxima noche.- mintió. Seguramente dormiría esa misma noche pero no la agradaba la idea de estar tanto tiempo con él.- No sé a donde iré, asique no tienes por qué acompañarme.
Entonces la chica se dio media vuelta y empezó a andar lentamente hacia el bosque.

habia llegado a los ojos de neliam hacia unas pocas horas, habia disfrutado bañandome en los lagos, habia bebido mucha agua y la caza en busca de comida se me habia echo sorprendentemente facil en aquel terreno, no estaba tan nerviosa ni melancolica como creia; a pesar de que kumiko se me habia perdido por el camino...
senti 2 presencias a unos cuantos metros, una me resultaba extrañamente familiar... me acerque un poco mas y pude verla ¿kumiko? estaba frente a un hombre bastante alto y de cabello oscuro que ademas tenia un aura extraña, cruel.
me acerque despacio a ellos y note que estaban extrañamente cerca, ademas ella parecia algo nerviosa, no pude evitar soltar una risita, me habia quedado claro que el fuerte de kumiko no eran las relaciones e imaginarla teniendo novio resultaba extraño.
continue analizando a aquel sujeto, pude ver que era humano, no parecia tener nada extraño sinembargo su aura me resultaba desagradable por algun motivo, quiza pura paranoia...
- hola kumiko salude ignorando al otro sujeto cuanto tiempo...

*Mire a la otra mujer, el estaba siguiendo a la chica* Buenas señorita.... *una leve reverencia, que hizo que la capucha tapase su rostro, mientras la capa negra ondeaba en el viento, vestía totalmente de negro, negro como la noche, su mirada se poso en la recién llegada, como si estuviese vigilando sus movimientos, mientras se ponía recto, y pensaba: Una nueva victima, que bien....., una sonrisa apareció en su rostro ante ese pensamiento, una sonrisa macabra que parecía estar ideando algo, después se apoyo en el árbol y mire a las dos mujeres, tal vez hoy era su día de suerte, dos victimas para el....eso estaba muy bien, pero esperaría mientras se mantenía atento para que lo que fuesen a decir.*

La chica que ya se estaba casi adentrando en el bosque se paró en seco al oir aquella voz que conocía, chocándose casi con Lurr. Se dio la vuelta despacio, como si no la importara nada. Enarcó una ceja cuando vio como el caballero parecía comportarse como tal con ella.
- ¿Ahora te comportas bien?- susurró la muchacha hacia Lurr para que esto no lo oyera la otra chica.
- Hola... lo siento por irme antes.. pero ya sabes.. no soy persona de compañías...- dijo dejando los ojos en blanco durante un instante pensando en quien la acompañaba.
Kumiko que todavía se encontraba cerca de él se giró deprisa haciendo que su pelo casi hiciera de látigo en la cara encapuchada de él.
- Uy, lo siento...- dijo pícara y dirigiendose a la chica la dijo.- pensaba continuar andando... acompáñame.
Casi parecía una orden, pero esperaba que la chica la siguiera y no se quedara con él. Por si acaso.

el me saludo con una reverencia que a mi me parecio ligeramente burlona, vestia de negro y tenia una sonrisa extraña, casi podria decirse que macabra, su aura me parecia aun mas desagradable que antes, por lo que resolvi ignoralo completamente.
kumiko se disculpo con migo por irse antes, yo movi la cabeza como quitandole importancia, note que ella tampoco disfrutaba mucho con la compañia de aquel hombre, y me fije en que ya estaba alejandose cuando yo apareci.
me dijo que la acompañara.
-encantada- murmure
el aura de ese hombre comenzaba a traerme malos recuerdos a la mente... ¿seria un nigromante? era una posibilidad.
sin mirarlo siquiera camine hacia kumiko.

*Mire a las dos, pensativo, después negué con la cabeza y me tape aun mas con la capa* Bueno, pues me iré entonces. *La figura desapareció en la niebla, aunque aun se podía sentir su presencia, no se fue, mientras se apoyaba en el árbol y empezó a seguirlas lentamente, sigiloso como la muerte, mientras se apoyaba en los arboles si se paraban un momento, después saco una manzana y la pego un mordisco hambriento, mientras pensaba en que podía hacer, tal vez las podía asustar un poco, apareciendo y desapareciendo, o tal vez rodeándolas con un manto de oscuridad, todo era posible, encima no eran rivales para el.*

A la chica se la escapó un suspiro de alivio cuando vio que la chica la seguía sin rechistar. Observó por el rabillo del ojo que Lurr se iba escondiendose en la niebla pero gracias a su buen sentido auditivo pudo escuchar sin problemas que él las estaba siguiendo. Inconscientemente empezó a bajar el ritmo de sus pasos cuando empezó a dudar de si pararse y hacerle frente o continuar andando y hacer como si no se diera cuenta.
Estos cambios de ritmo seguramente los notaría Zahira, asique se paró para mirarla para así no parecer que dudara y que todo estaba controlado.
- Ese de antes... no sé quien es... - hizo una pequeña pausa y continuó- de verdad, siento haberme ido antes,pero... me sentía incomoda.
Kumiko se encogió de hombros y esperó su respuesta. La verdad no la importaba su respuesta, pero mientras ella hablara podría así decidirse mejor si ir hacia él o continuar andando. No sabía si ella se daría cuenta de que las estaba siguiendo pero por si acaso no quería preguntarselo.

kumiko y yo comenzamos a caminar y el hombre finjio irse, la verdad no hacia mucho ruido pero mi percepcion me indicaba que estaba alli, segui caminando esperando a ver que queria.
- descuida - le conteste a kumiko - yo tampoco estoy muy acostumbrada a andar con gente...
el hombre aun nos seguia y senti como cogia una manzana y la mordia, por alguna razon su tranquilidad acabo con mi paciencia
- tengo hambre, y senti un ruido, sera un animalito voy a cazar
sin esperar respuesta puse una flecha en mi arco camine unos cuantos pasos hacia donde estaba el hombre y dispare a la manzana que estaba comiendo, con algo de suerte se moveria y le daria en la mano.
- ¿alguna razon en especial para seguirnos? - pregunte dirigiendome a la figura negra a la que le habia disparado

*Se mantenia escuchando y cuando un disparo atraveso su manzana la mire furiosa, empezo a desaparecer y aparecio a su espalda, la cogi del cuello y la mire mientras controlaba su fuerza* ¿Como se te ocurre intentar darme con esa flecha inútil hadita? ¿Acaso quieres morir a una edad temprana? si es así tendré gusto en matarte. *la solté, mientras la miraba con una furia asesina, pensando si en matarla y dejarla en el suelo inerte o dejarla vivir, pero si volvía a amenazarla la mataría* y os seguiré si me apetece ¿no crees? *Mientras posaba la mirada en las dos mujeres por si le intentaban hacer algo y una mueca cruel aparecía en su rostro*

La mano de Kumiko se posó en su frente en señal de frustración cuando vió lo que iba a hacer Zahira.
-No sabes donde te metes...- dijo cuando vió que ya había lanzado la flecha.
Observó la escena que ocurrió muy deprisa como si no tuviera nada que ver, pero cuando vió que él la cogía por el cuello y ella del susto soltaba el arco lo cogió y le apuntó. Él ya la había soltado y las observaba pero eso no hacía que él pudiera continuar atacando.
- Eh... caballerito, ya sé que te hemos gustado... pero no me gusta tener perros falderos.- dijo altiva sin soltar el arco.- ¿Y a ti Zahira? ¿Te gusta tener perros falderos grandes negros y babosos?
Kumiko sabía que quizás se estaba pasando pero estaba nerviosa y las palabras salían de su boca sin su consentimiento.
-Y... oh, se un poco mas original con tus trucos de magia... o al final terminaré creyendo que solo sabes ese.- añadió refiriéndose al poder de desmaterializarse y materializarse a su gusto.

me sorprendio mucho cuando me tomo del cuello y no pude mas que soltar el arco, senti que kumiko lo cogia y le apuntaba, era un nigromante vale, eso me quedaba claro, y por alguna razon estaba menos asustada de loque deberia. - bueno afin de cuentas-pense - llevo años escapando de uno y aun no me a cogido ademas era evidente que, al menos por ahora, el solo queria jugar.
- cuanto lo siento- dije con el tono mas sumiso que pude despues de que me solto -creia que eras alguna clase de animal... es una suerte que no aya apuntado un poco mas arriba ¿no?
quiza el fuera mas fuerte que nosotras pero yo estaba en mi territorio y apesar de no ser una maga conocia unos cuantos trucos que implicaban arboles y dejar inmovil al enemigo por muy mago que este fuera.
- no la verdad a mi tampoco me gustan los perros falderos....- le sonrei a kumiko
mientras buscaba una via de escape en caso de que fuera nesesario... habia plantas a punto de germinar bajo los pies del hombre.. que conveniente. una flor grande y llena de espinas estaba a un metro mio, la rama de un arbol justo sobre mi cabeza... mis dagas aun seguian escondidas entre mi ropa, quiza no fuera tan dificil.
me concentre en mi plan de huida para asi poder olvidarme completamente de lo asustada que deberia estar...